La variante Inglesa (B.1.1.7) y la variante New York (B.1.526) contienen mutaciones relacionadas con el aumento de la transmisibilidad que significa un rápido incremento de casos de COVID-19.
Evidencia científica indica que la variante Inglesa puede estar asociada con un mayor riesgo de muerte que las variantes preexistentes y que puede burlar tanto la inmunidad natural como la inducida por vacunas, es decir que podríamos tener casos de reinfección ya que una infección previa con variantes preexistentes no implica que estemos completamente protegidos de estas nuevas variantes.
A la fecha se han reportado 6 genomas pertenecientes a la variante Inglesa en Ecuador, las cuales pertenecían a casos importados. El Centro de Investigaciones de la Universidad Espíritu Santo han venido realizando la Vigilancia Genómica del virus durante los últimos meses a cargo de los científicos doctores Derly Andrade Molina y Juan Carlos Fernández y acaban de reportar resultados preocupantes al encontrar que la variantes Inglesas y New York están circulando en la provincia del Guayas desde el mes de febrero 2021.
De 22 muestras de SARS-CoV-2 secuenciadas, el 20 % corresponden a la variante Inglesa y el 10 % a la variante de New York, tratándose además de casos de transmisión comunitaria. Estos resultados deben poner en alerta a la población local, siendo imperativo el uso constante de mascarillas, mantener el distanciamiento social, evitar reuniones y lavarse las manos con frecuencia.
Las medidas de salud pública adecuadas y la aceleración en el proceso de vacunación es fundamental para reducir el riesgo de generación y dispersión de nuevas variantes que pueden burlar el sistema inmunológico incluso de las personas vacunadas.