Ecuador cuenta por primera vez con un inventario integral y actualizado de la flora vascular no nativa de su territorio continental, resultado de un trabajo colaborativo liderado por Ileana Herrera, docente investigadora de la Universidad Espíritu Santo (UEES), junto con el Instituto Nacional de Biodiversidad (INABIO) y 23 investigadores nacionales e internacionales. Publicado en la revista científica NeoBiota, el estudio identifica 1.260 taxones no nativos —incluidos cinco regionales—, de los cuales 486 crecen en estado silvestre. Esta cifra duplica los registros de inventarios anteriores y establece una base científica sólida para el desarrollo de políticas públicas que salvaguarden el ambiente, la economía, la salud humana y animal, y la bioseguridad nacional.
El análisis detalla que el 52% de los taxones silvestres están naturalizados y el 48% son considerados casuales. Más del 60% provienen de Asia y/o África, con un predominio de hierbas (67%). La región Andina concentra el 93% de las especies no nativas silvestres, seguida por la Costa (52%) y la Amazonía (37%), las regiones comparten muchos taxones, aunque algunos son exclusivos de una región. Las familias más representadas son Poaceae (16%), Asteraceae (10%) y Fabaceae (9%). La historia de introducción que pudo recopilarse revela que el 87% de estas plantas han estado en el país menos de 125 años, con un aumento notable desde 1915. Casi el 80% tienen usos documentados, principalmente ornamentales (42%) y medicinales (38%), lo que, junto con un mayor tiempo de residencia, incrementa las probabilidades de naturalización.
Más que un simple listado, este catálogo constituye una herramienta estratégica para prevenir la entrada de nuevas especies invasoras, priorizar acciones de control y erradicación, reducir riesgos para la salud y la seguridad alimentaria, y proteger sectores productivos como la agricultura, la ganadería y el turismo. Además, fortalece el cumplimiento de compromisos internacionales como la Meta 6 del Marco Mundial de Biodiversidad Kunming-Montreal, el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) y la meta 15.8 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), así como el avance de políticas y estrategias nacionales como la Estrategia Nacional de Biodiversidad y su Plan de Acción y Plan de Acción Nacional sobre Especies Exóticas Invasoras.
“Este catálogo no es solo una lista, es una ruta para la acción. Sin información sólida es imposible diseñar políticas efectivas que frenen el avance de las especies invasoras y protejan nuestro patrimonio natural.”
Con iniciativas como esta, la UEES se consolida como un actor clave en la investigación científica de alto impacto, posicionando a Ecuador en la vanguardia regional de la bioseguridad y la conservación.
La Universidad Espíritu Santo (UEES), inicia sus actividades académicas en el año 1994 como institución privada, autofinanciada y sin fines de lucro. Su espíritu de compromiso y constante innovación están presentes en la calidad del servicio que ofrece a su comunidad.